Desde hace un tiempo, hemos ido explorando cada uno de los chakras principales, centros energéticos del ser humano. Estamos entrando en la recta final, por así decirlo. Nos ocuparemos en este artículo del sexto chakra, el del Tercer Ojo.
Ajna es un Chakra altamente espiritual: es el centro de la intuición, habilitador del Sexto Sentido, aquel que va más allá de las percepciones sensoriales del mundo material.
Tal como los animales pueden sentir que se acercan determinados fenómenos naturales, o que corren un peligro inminente sin ver siquiera al predador, también los seres humanos tenemos un sexto sentido intuitivo. Por desgracia, perdemos contacto con él,debido a que vivimos inmersos en un mundo fijado a la experiencia material. Por supuesto, esto no quiere decir que la evidencia empírica deba ser descartada, pero la intuición puede ser una fuerte guía para tomar decisiones que tengan en cuenta tu integridad como ser humano: cuerpo físico, energético y espiritual.
Esas famosas “corazonadas” pueden ser una señal de tu conocimiento interior tratando de salir a flote; un mensaje de lo más recóndito y ancestral de tu ser.
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Ajna y la Vista
Puede parecer contradictorio hablar de la relación de Ajna con el sexto sentido, para luego relacionarlo con el más terrenal sentido de la vista. En realidad, esto no es así. El don de la visión nos permite observar el mundo exterior, absorber la información que se nos presenta, e interiorizarla, afirmando nuestra posición en la realidad.
Sin embargo, por tratarse del chakra del Tercer Ojo, debemos referir aquí a otro tipo de visión: una visión cósmica, trascendental; una visión que es capaz de percibir las cualidades más sutiles de la realidad. Es una puerta a la conciencia superior, allí donde superamos la aparente dualidad que nos separa como individuos del entorno en el que estamos inmersos.
Es también ventana a visiones metafísicas, oníricas y místicas. Muchos aseguran que la apertura del Tercer Ojo puede causar sueños lúcidos, y otorgar al individuo los dones de la clarividencia, clariaudiencia, e incluso telepatía.
Desbalance del sexto chakra
La sintomatología física de un Sexto Chakra desbalanceado se relaciona a problemas de la visión (desde visión borrosa, hasta ceguera parcial y otros problemas relacionados con los ojos). También es muy frecuente que cause mareos, dolores de cabeza, y migrañas. En casos más severos, pueden observarse lesiones y tumores cerebrales, convulsiones, y problemas cognitivos.
En el plano emocional y psicológico, trae aparejados problemas tales como depresión, ataques de pánico, insomnio, y personalidad adictiva con su consecuente abuso de drogas, alcohol, etc. Es habitual que, quienes tienen un tercer ojo bloqueado, sientan una gran desconexión con la realidad, como si no formaran parte del mundo, sino que mirasen desde detrás de una pared infranqueable. Esto dificulta mantener actividades en el tiempo, imposibilitando la adquisición de nuevas habilidades y conocimientos, y dificultad para recordar datos importantes.
Por otro lado, cuando el sexto chakra se encuentra sobreestimulado al extremo, en general por una deficiencia holística de los chakras inferiores, podemos ver casos de alucinaciones, delirios, y despersonalización. Estas personas pueden experimentar fantasías que parecen más reales que la realidad misma, prefiriendo vivir en ellas.
Por último, en el plano espritual,un desbalance en el sexto chakra se manifiesta como falta de conexión con tu verdad interior, falta de visión intuitiva. Quien se encuentra bloqueado, rechaza toda noción de espiritualidad, de un plano superior de la existencia; se encuentra atascado en un escepticismo dañino, que turba toda claridad e impide ver más allá de los problemas inmediatos y terrenales.
Más sobre Ajna
Por conocimiento popular, la mayoría de las personas reconocen, al menos de todo superficial, la ubicación de este chakra: basta con relacionarlo con el tercer ojo para que señalemos un punto entre las cejas, por encima del puente de la nariz. Es importante aclarar, sin embargo, que existe una generalización errónea: el Tercer Ojo no está en el medio de la frente, si no un poco más abajo.
También se asocian a Ajna la glándula pituitaria, parte del cerebro, la base del cráneo, y, muy especialmente, los ojos, vehículos de la vista, que nos ayuda a interiorizar el mundo externo, en esta cultura visual en la que nos vemos inmersos.
Desde la práctica de yoga, elegiremos asanas más orientadas a la contemplación, que nos permitan concentrar y guiar nuestra energía hacia el tercer ojo. Puede que no sea un ejercicio físico extenuante, pero unos minutos sentados en asanas sencillas, como Vajrasana o Virasana, nos invitan a observar, a interiorizar las visiones y sensaciones que van apareciendo. También podemos experimentar con posturas preparadoras para inversiones, estimulantes del séptimo chakra.
Animamos el uso de Mudras y la atención especial a la posición de las manos. Prueba el Mudra específico del Tercer Ojo, o experimenta llevando hacia él tus pulgares, o tapándote los ojos.También es recomendable la práctica de ejercicios de Gimnasia Ocular.
La práctica regular de Meditación es esencial para un despertar del sexto chakra. Puedes beneficiarte de una meditación guiada, pero también puedes probar utilizando una vela como punto focal (Trataka), o cerrando los ojos y enfocando a la vista hacia el Tercer Ojo. Este chakra es particularmente sensible a los estímulos visuales, así que puedes experimentar con meditaciones al aire libre, a la luz de la vela, o en cualquier otra situación que te lleve a percibir los sutiles bailes que realiza la luz desde atrás de tus párpados.
En cuanto a la alimentación, se recomienda ingerir alimentos con pigmentación azul. Esto puede parecer imposible, ya que el azul es el color más raro en la naturaleza, pero existen ciertos alimentos al alcance que podemos consumir, tales como los arándanos, y otros que contienen azul en su composición morada o violácea, como las moras, frambuesas, y uvas.
Si gustas de la Aromaterpia, recomendamos los aceites esenciales de incienso, mirra y madera de cedro. Si prefieres conectarte con las frecuencias vibratorias de las piedras y gemas, prueba con Amatistas y Labradoritas.
- Vajrasana, la postura del diamante
- Adho Mukha Svanasana, postura del perro cabeza abajo
- Garudasana, postura del águila
- Pincha Mayurasana, postura del pavo real
Ver más posiciones de yoga relacionadas
Elemento: Luz, combinación de los elementos
Color: Indigo
Cantidad de pétalos en el loto: Dos
Mantras: Aum, Om, Mmm
Verbos: Ver
Asociaciones físicas: Ojos, base del cráneo, sienes, glándula pituitaria
Identidad: Arquetípica
Desafío a superar: Ilusiones, espejismos
Planetas/Astros: Saturno, Luna
Deidades: Hakini Shakti, Shiva
Aromas: Artemisia
Hierbas: Almendro
Maravilloso y simple. Namaste!!
Gracias por el aprendizaje que me dan gracias gracias gracias
Es muy interesante conocer sobre los chakras y como utilizarlos para estar en contacto con nosotros mismos, mil gracias por la información, saludos
Gracias a ti por dejarnos tu comentario, Araceli!
hola !! genial toda la info, tenia ganas de aprender mas sobre la meditacion y apareció este articulo de la nada….saludos, me gustaria recibir un boletín o info si es posible porfa????????
Nos cruzamos en tu camino en el momento justo, Denisse. Hemos escrito sobre meditación en varias portunidades (cómo empezar, meditación vipassana, meditación para niños, etc). Puedes explorar esos artículos si lo deseas. También puedes suscribirte al enwsletter dejando tu mail en la casilla que encontrarás a la derecha. Namaste 🙂
Cuanta información, gracias por compartirla. Ahora a po erla en práctica…